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Buhardilla

Llegué tarde a mi propia fiesta

No tenía ninguna intención de hablar sobre lo que se ha derivado de este post (aún ahora me parece innecesario pero creo que tengo cierta obligación moral). Lo he repetido mil veces, dos páginas no me parecen graciosas se entiende mal -o se quiere entender mal- y todo un colectivo se vuelca contra mí, jiji, jaja. Punto pelota. Ayer por la mañana más de lo mismo. Salí del curro a las dos y media como siempre y salvo para unas breves conversaciones por GTalk no utilicé internet despreocupándome de por dónde había seguido el tira y floja del que yo pretendía pasar pues consideré que ya había dicho todo lo que tenía que decir, con esto, me pasé la tarde viendo Long Way Round.

Esta mañana, en el trabajo, he abierto el correo esperando que se hubiesen calmado los comentaristas (me reservaré lo de trolls no vaya a ser que me apedreen) y a parte de esos comentarios me he encontrado con dos pingbacks hacia esa entrada, uno por parte de La Taberna y otro por parte de Ponzonha, al poco rato uno nuevo de Criando Cuervos. Leí medio a escondidas esos posts sin entender nada. Se había publicado otra entrada, aparecía una foto mía y luego esa misma entrada había sido suprimida. Lógicamente yo no era consciente de que había pasado algo así. Pero no le di importancia, seguía (y sigo) en mis trece de pasr del asunto ya que desde un momento he jugado con todas las cartas sobre la mesa y mantengo todas las palabras de aquél «conflictivo» post una a una sin retractarme de nada ya que bajo mi punto de vista, tengo razón, y esas dos páginas siguen sin parecerme graciosas. Ahora menos, no soy gilipollas.
Me habló Ponzonha, que extrañamente estaba conectado, y yo, que es viernes, decidí relajarme la mañana también, y me indicó por dónde iban los tiros. Más adelante la famosa entrada con la foto había sido compartida y comentada mediante Google Reader por varias personas como WhisKiTo, Alexliam, Harad o el mismo Ponzonha y gracias a los comentarios de Zetxek en ese documento compartido pude ver en vivo lo que había pasado, dando así sentido a los enlaces entrantes de principio.

Llegué tarde a mi fiesta

Bien, llegados a este punto quiero agradecer esas entradas -permitid que lo haga de un golpe- y los comentarios en la de Google Reader que si bien me estaban apoyando (MacOS Lucas con demasiado énfasis, pero sonaba divertido). Por otro lado reiteraré que mi postura ha sido clara desde el primer momento y no creo que se pueda decir que les haya seguido el juego ya que comenté lo que me pareció oportuno tanto aquí como allí y con toda la educación que pude (ya podréis imaginar que costó) y al ver que no recibía el mismo trato lo dejé estar.

Como corolario a esto (creo que es la primera vez que utilizo aquí esta expresión pero el tono casi solemne del post lo requiere) diré que si ya es molesto llegar tarde a los comentarios de una entrada de un blog propio, es más molesto ser protagonista sin buscarlo (y que si mis palabras han molestado a alguien que se joda -adiós al tono solemne-, pero no tiene razón y no me sacaréis de esas casilla sin argumentos firmes pues si bien rectificar es de sabios no creo que sea necesario, y no, insultarme no cuenta como argumento válido aunque con ello se quiera hacer la misma pupa) y encima de ser protagonista llegar tarde al «gran día».

Finalmente, si alguno de los que dijo que mejor que no fuese al EBE (ya recordé que no tengo intención de asistir a ningún show 2.0) vuelve por aquí y lee esta entrada diré, como una afirmación más, que ganas ya me están entrando. Valientes. Y este era otro motivo por el que es mejor que no publique estas cosas.

Visto en: Un Lagarto Abuhardillado.

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Jajajás

Alcedo atthis

Scorsese

Visto en: Kodak Bay Theatre.

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Pensando en alto Tecnología Videojuegos

El índice Big Mac de los gráficos

Con todo esto de mirar ordenadores me he dado cuenta de que hay patrones de conducta que se repiten (por eso son patrones, vaya). A mí me da exactamente igual tardar 7 ó 9 minutos en transformar una película de HD-Spain al formato de la PS3. Pero los gráficos no me dan lo mismo. Estas comparativas, generalmente mostradas en barras de colores del Excel fácilmente manipulables, son datos más o menos útiles.
Los portátiles con tarjeta gráfica integrada en la placa tienen más problema, cuando notes que vaya lento te jodes, lo tiras a la basura o lo llevas al Cash Converters de turno para cogerte otro. Motivo por el que si quieres jugar a algo más potente que el Solitario (aunque sea una sola vez) o ver películas con calidad de imagen notable, conviene echar un ojo y prestar atención a esas barras.

WOW, índice Big Mac de los gráficos

El estándar WOW, Mac Menú de orcos

Lo que me ha llamado la atención es que para dar a enteder cuánta potencia gráfica tiene un ordenador se hacen dos pruebas tipo, una de ellas es siempre la misma. Primero se mete un juego potente del momento o alguno que la comunidad tenga en mente como pepino, un Crysis o algo así, a la resolución más basta que se pueda, forzando maquinaria. Estos datos se dan con desgana, te los sueltan y los acompañana de algo como «Si lo que buscas es jugar a esto mejor mira una consola» o algo así, vamos, nada nuevo y totalmente previsible, en cambio hay una religión tecnológica que dice que hay que tomarse al pie de la letra lo que digan los resultados del test de World of Warcraft, y las pruebas se hacen con este juego sí o sí. Sin rechistar. Funciona igual que el precio de una hamburguesa para medir el poder adquisitivo de un país.

La imagen  del post (robada de Cult of Mac) es una prueba. Sucede lo mismo que cuando buscas coche, miras consumo, el número de airbags, el par motor etc, aquí miras el procesador, la cantidad de RAM y cuánta imágenes por segundo puede mostrar mientras juegas a eso. Y yo lo entiendo. A ver, es un juego con millones de seguidores activos en el mundo y debido a esto es lógico que lo tomen como unidad de medida. Pero no lo termino de ver bien porque es un juego con unos cuantos años encima y con unos gráficos que no despuntaban ni cuando salieron. Vale que no era lo que se buscaba porque así se movería todo más fluido, pero es como decir que un ordenador cualquiera, nuevo, mueve Los Sims o Tomb Raider IV a una velocidad de vértigo cuando ya ha llovido mucho desde que lo lanzaron para Pentium II. ¿Qué pasa?, yo sigo jugando jugando a Los Sims y a Tomb Raider.

Visto en: Reviews.

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Pensando en alto

Empresas con dominio de email gratuito

Mi reciente encontronazo con el verjado de Apple de esta tarde me ha acordado un tema que tenía en el tintero. Las empresas que no se pagan un dominio de correo electrónico. Suelen ser pequeñas empresas de barrio dedicadas a la pintura, albañilería, carpintería o cosas así.

Son cutres y tienen dos signos que las identifican, el primero es que su «logo» es un clipart de Microsoft Office. Generalmente el del monigote negro que realiza alguna actividad laboral. Y luego lo que comentaba, en la furgoneta, justo debajo del dibujito (con su sombra y todo) aparece el número de teléfono fijo, el móvil y un correo electrónico gratuito. Un dominio de correo cuesta cuatro perras, no hay excusa económica que valga. adoquines_hermanos_gonzalez@terra.es no vende, pero se lo dieron por contratar el internet de la oficina. Siempre he sido partidario de los del formato: hola@dominio.com. Son más saladosy hacen la comunicación menos fría.

Pero da igual, hago un esfuerzo por abstraerme de mis prejuicio y subir niveles en mis escamas mentales hasta el punto de entender que un grupo de obreros de barrio ni se plantee pagar 3€ al año por algo así. Pero que venga un supuesto diseñador gráfico a pedir que le miremos su web y me deje una dirección compuesta por su fecha de nacimiento y el nombre Hello Kitty alternando mayúsculas y minúsculas y el dominio de Hotmail no lo perdono. Hay que ser cutre. Aquí si que ni imagen corporativa ni Dios que la fundó.

Visto en: Y sí, era un tío.

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Apple Citas y frases Tecnología

18 minutos y 22 segundos

Disculpe la demora, por favor, manténgase a la espera y en breves momentos le atenderá uno de nuestros agentes.

Robot de la tienda de Apple.

Instantes después llamé a Microsoft (se suponía que ya habían cerrado, ojo) y descolgaron al instante. I’m a Mac, I’m a responsible enterprise.

Visto en: 900 150 503.