Por si no os habéis enterado, hoy ha habido una presentación de productos de Apple, la antaño empresa informática que producÃa ordenadores y hasta hace nada sistemas operativos decentes para ellos. Y he de decir que ha sido de las más graciosas. Para mà la que más. También se debe a que llevo una semana algo más hijo de puta que de costumbre, pero me ha encantado ver a Jobs pausar sus discursos, como bien tenÃa programado, para que el público aplaudiera y, al ver que aquello no tiraba, retomar disimulando con cara de extrañeza y un «Woops!» su palabrerÃa. Hasta él se ha dado cuenta de que la gente, avispada, miraba con extrañeza ese reproductor Blusens de Carrefour (o DealExtreme) que presentaba como iPod Nano, y que no puede pegarse 10 minutos para hablar de un iPhone sin capacidad de llamar. De verdad que me he reÃdo mucho. Tal vez sea por haberla visto en vivo a traves de una web que han facilitado, de esas estándares que sólo funcionan en Safari. Ah, sÃ, también han cogido una Play3, le han quitado la capacidad de jugar, la capacidad de almacenar datos, la capacidad de hacer pesas con ella y la han rebajado el precio a una tercera parte. Han mantenido el color, blanco Apple. Y tal. No, es coña, que tengan los huevos de decirme que no hay en el mercado productos que cumplan esas funciones facilmente cuando llevo haciéndolo sin molestias años desde mi consola… Pues eso, ¿quién lo va a aplaudir?
En el apartado del software, aparte de un parche para los móviles, han dicho algo de actualizar iTunes. Más risas. Una red social con nombre de comando de red (que llega un porrón de años tarde o unos pocos menos) que ha servido para que veamos cómo nos intentaba hacer creer que era el fan número uno de Lady Gaga -quien antes de lanzarse al público la aplicación ya contaba con unos falseados 90.000 seguidores y escuchaba a Metallica-, momento en el que el vÃdeo se cortó, por cierto, un par de veces (eso hace… unas tres millones menos que cuando hace años lo seguà por Applesfera). Una curiosa herramienta que no voy a actualizar en absoluto ya que las asombrosas novedades que trae no me sirven ni para darles por cool. Quieto. Respira.
Pero me mola su logo. Ha sido amor a primera Vista.
Nada más verlo he soltado otra carcajada, porque una cosa es que le manguen a Atari y otra que se lo levanten a la empresa a quienes llevan años criticando por imitarles el estilo. Igual ha sido sólo mi cabeza la que ha visto el parecido (y ha decidido montar ese bonito collage en un programa sin licencia)
No me quedan más palabras amables para hoy. Voy a seguir estudiando, con los cascos en mi nada brand new pero sà bonito mazacote iPod con vÃdeo al que le sigue fallando la clavija, ese que ya no permiten comprar. Vintage.
Visto en: Apple Special Event Septembre 2010.
6 respuestas a «El extraño reciclaje de logos de Apple»
Cada dÃa son más cutres.
Han llegado a un puno de creerse tan divos que es hasta esperpéntico, es como una autoparodia xD.
En fin, me voy, que quiero huir antes de que lleguen los fanboys a lapidarte.
¡A la yugular! No tengo ni idea de Apple pero me hace ilusión una entrada asÃ. Yo que sé.
De acuerdo en todo, aunque lo del logo está un poco cogido por los pelos. No sé, solo es un cÃrculo azul con un icono dentro, a cualquiera se le podrÃa haber ocurrido. Me da más que es una casualidad, por lo que el error es que deberÃan haber usado algo menos parecido para evitar suspicacias.
Mientras la gente siga usando garageband para grabar sus podc…oh wait!
A la bellÃsima persona de Ellohir; pues ese es el programa que más me gusta :P
El problema de esto es que ahora te enteras de que Apple está presentando tal y cual. Hace unos años casi nadie seguÃa estas cosas sino que de pronto veÃan que se le actualizaba el iTunes mientras decÃan al de al lado «oye, estos han cambiado el icono, ¿no?». Ahora la conferencia trasciende como una noticia en sà misma, y por eso es todo tan patético porque para presentar cuatro bobadas se tiran dos horas explicando obviedades.
Respecto a su red social, huele a fracaso por todas partes a no ser que incentiven el uso en forma de regalo de contenido (en plan, «si recomiendas tal disco a 10 amigos te puedes bajar el single gratis» o «si tu amigo compra el disco que le recomendaste obtienes un bono para bajar dos canciones de otro»), etc. En ese caso lo petará.