I‘m my own worst enemy
I’ve given up.
I’m sick of feeling,
Is there nothing you can say.Take this all away.
I’m suffocating.
Tell me what the fuck is wrong,
With meGiven Up, Linkin Park.
Visto en: Enigma.
I‘m my own worst enemy
I’ve given up.
I’m sick of feeling,
Is there nothing you can say.Take this all away.
I’m suffocating.
Tell me what the fuck is wrong,
With meGiven Up, Linkin Park.
Visto en: Enigma.
Unos metros más y ya habré terminado de cruzar a la otra acera. Lo digo tal cual lo pienso: Mecano ha sido lo único bueno de la -ojalá nunca hubiese existido- Movida, y posiblemente (gracias a José MarÃa Cano) el mejor grupo Español que ha habido. Por desgracia es recordado por llegar tarde al no haberse puesto el maquillaje, je, je.
Pero el grupo tiene melodÃas (y letras) que escapaban a mi conocimiento y que, una vez escuchadas, no hacen otra cosa que no sea dar a replay. Esto sucede con los discos Entre el cielo y el suelo, Descanso dominical y Aidalai. Vamos, la mitad y última etapa, porque «Me colé en una fiesta» no me aporta gran cosa, como era previsible.
Me fascina que hayan tratado temas como la esclavitud, muerte, drogas, Almodóvar, la Corona, el sexo, Penélope Cruz o el Dalai Lama con tanta clase, imaginación, musicalidad y coherencia. Vamos, que dudo que la SGAE estuviese de acuerdo en aceptar sus letras polÃticamente incorrectas y a ver cómo se las apañan, tendrÃan que recurrir al rap cual Tote.
Para sincerarme deberÃa reconocer que yo soy uno de esos niños que creció escuchándolos en el coche porque eran las cintas que tenÃan sus padres (eso y King Crimson, pero nunca me habÃa dado por recuperar momentos poperos de mi niñez) asà que ahora, a los 19, me descubro Bailando Salsa.
Sólo me cuestiono si ripear los cedeses de mis progenitores o descargarme el recopilatorio (torrent). Bueno, ya lo he decidido.
En fin, no sé qué más puedo decir. Tendré que permitir que Malkav me quiera romper la cabeza mientras me inculca su música de emo… pero el que prefiera que se vuelva a Senegal.
Visto en: Youtube.
Hoy, o técnicamente ayer, ha sido dÃa 10, una fecha marcada en mi calendario como el dÃa de pagos. A esta hora, doce y poco (ya del dÃa 11) no se ha transferido nada, lo cual consigue cabrearme bastante, mi dinero es mÃo y aunque no lo quiera gastar ahora, prefiero verlo puntualmente en mi cuenta cada mes, que al menos sabré si puedo o no invertirlo en inmobiliarias.
Esto me ha hecho pensar en dos cosas, una: ya llevo más de un mes currando como becario y parece que empecé ayer, do:; hace casi medio año que andaba suspendiendo el carnet práctico y parece que fue antes de ayer.
Bueno, si nos ponemos asà sólo me doy cuenta de la mitad de cosas, y eso me hace parecer el doble de tonto. El tiempo vuela, my old friend.
Cuando escribo esto lo hago en mi mañana para que vosotros lo leáis en mi ayer (creo que se comprende).
Pero eso no es nada, lo que pasa es que no sé dónde se han metido los meses de mi vida que van desde noviembre hasta hoy. Es como si me hubiese aletargado y me comience a despertar en primavera, por las lluvias, tal vez. Me parece que puedo afirmar que ese perÃodo de tiempo no lo he vivido.
Un paréntesis donde he estado en stand-by, como un autómata. Porque joder, hace nada que entregué las prácticas de febrero y casi tengo terminada una de junio, no lo entiendo. No «recuerdo» haber pasado por marzo… ni lo que llevo de abril. Casi que ni lo de Praga, y fue hace dos semanas.
Es como si mi buhardilla fuese un mundo dejado de Dios (que lo es) donde al contrario que en el DÃa de la Marmota cada jornada nueva es igual que la anterior pero los dÃas pasan en el calendario.
Y asÃ, amigos, uno vuelve a darse cuenta de que su vida es una puta mierda porque no la vive, y vivirla es todo lo que pido en esta vida insana. Que pasen treinta años antes de mañana.
Visto en: Nokia S60, sÃ, mi calendario móvil es asÃ.
Creo que deberÃa dedicar una categorÃa exclusivamente a los cambios que estoy notando en mÃ, costumbres que aparecen y desaparecen.
Hoy me he encontrado a mà mismo cantando «Welcome to the Jungle» en la ducha. Ni si quiera me gustan Guns ‘n’ Roses, pero ahà estaba, despelotado y enjabonado cantando esa canción. Lo sorprendente no es que sea de ese grupo -que también- si no que yo nunca habÃa cantado en la ducha porque con el ruido del agua apenas me oÃa los pensamientos.
No sé que será lo próximo, a lo mejor me termina gustando el bróccoli…
Visto en: 9:17.
Siempre me he considerado un tipo simpático, difÃcil de alterar, razonablemente ingenioso y también predecible. Lo cierto es que no cuesta mucho hacerme sonreÃr.
Hoy la realidad me ha regalado una de sus bofetadas haciendo que me reencuentre con unos amigos que no veÃa desde hace año y medio, y que han terminado diciendo cómo habÃa cambiado.
Que se me veÃa triste, cansado, y sobre todo, muy serio. Pero yo no era consciente de ello.
Asà que me puse a pensar. Y tenÃan razón. Me puse a recordar los últimos meses de mi vida, y sÃ, he ido perdiendo chispa, gracia… Pero he ganado en arrogancia y orgullo. No, tampoco conocÃa mi lado arrogante, pero lo veo ahora, intrÃnseco en mi vida. Ves que eres más frÃo, más serio, más calmado, que lo que te rodea cada vez te importa menos. Me asusta esa imagen.
Yo no era asÃ, y hasta hace nada la idea que tenÃa de mà mismo era totalmente falsa. Actuando de una manera que no se correspondÃa con lo que supuestamente hacÃa de forma inconsciente.
Estoy cansado, como si tuviese 50 años más de los que se calculan con mi DNI. Pero no me siento maduro, ni siquiera adulto. Me siento cansado, muy cansado, triste, no melancólico ni tampoco intento hacerme el interesante como antes, no, me siento triste. Y no encuentro respuestas.
A ¿estás bien? respondo Sà por pura inercia. No me paro a pensar cómo estoy, no lo he hecho seriamente en mucho tiempo. Llego a la aterradora sensación de no saber si me conozco.
No sé qué carajo decir, me he sido infiel. Pero ni la más mÃnima mueca se dibuja en mi cara desde hace ya algún tiempo, de haberse mostrado, no sé hasta qué punto era cierta.
Visto en: Youtube.